El 25 de mayo de 2022 la rama internacional de “Alliance Defending Freedom – ADF” publicó un informe especial con ocasión de cumplirse 20 años de la vigencia de la ley de eutanasia en Bélgica (28 de mayo de 2002).
Según explica el informe, la cantidad de personas muertas por eutanasia se incrementó de 235 por año en 2003 a 7 vidas por día en 2021. En total, alrededor de 27.000 personas fueron muertas por la aplicación de esta ley. En 2021, uno de cada cinco de los que murieron por eutanasia no enfrentaba una situación de muerte en el futuro inmediato. El informe está basado en los datos oficiales publicados por la Comisión Federal de Control y Evaluación de la Eutanasia de Bélgica, el organismo oficial de monitoreo de la ley.
Para ADF, en Bélgica se puede constatar que la legalización de la eutanasia, que inicialmente se dice que estará limitada a ciertas “condiciones estrictas”, termina derivando con el correr de los años en un aumento significativo de casos. Este argumento es conocido como la “pendiente resbaladiza” y en Bélgica se comprueba que aumentan tanto el número de personas a las que se aplica la eutanasia, como el número de condiciones que están habilitadas para poner fin a la vida. Para poner un ejemplo, actualmente en Bélgica puede pedirse la eutanasia por razones psiquiátricas, incluyendo la depresión. ADF, a través de Jean-Paul Van De Walle y Sophia Kuby, ha publicado un completo informe de análisis del argumento de la pendiente resbaladiza, que se puede consultar en línea en inglés: https://adfinternational.org/the-legalization-of-euthanasia-and-assisted-suicide/
ADF también da cuenta del caso de Tom Mortier, un ciudadano belga que está cuestionando la ley ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, luego de que su madre fuera muerta por aplicación de la eutanasia con fundamento en su estado de depresión a los 64 años. Tom recién fue informado un día después de la muerte de su madre y se le explicó que ella sufría “una depresión intratable”. Su madre estaba físicamente sana y el psiquiatra que la trató por más de 20 años expresó dudas sobre el hecho de que ella cumpliera todos los requerimientos de la ley belga de eutanasia. Sin embargo, ella fue muerta por un oncólogo que no tenía calificación en psiquiatría. Por estos motivos, Tom Mortier, con el asesoramiento de ADF, está cuestionando la ley belga ante el Tribunal Europeo.
Informe de Jorge Nicolás Lafferriere