El pasado 27 de marzo de 2020 el Comité de Ética Alemán dio a conocer su recomendación ad hoc “Solidaridad y Responsabilidad en la crisis de la Corona”[1] donde quiere proporcionar una guía ética tanto para este difícil proceso que por la propagación del virus Covid-19 está atravesando Alemania, como para las complejas acciones y situaciones de decisión que se desarrollan el sistema de salud.
En este sentido, el organismo menciona que el principal conflicto ético que se presenta es la necesidad de garantizar un sistema de salud de alta calidad y a largo plazo manteniendo al mínimo los efectos secundarios graves para la población y la sociedad, situación que requiere una ponderación justa de los bienes morales implicados en relación a los principios básicos de solidaridad y responsabilidad.
Así, procura evitar que los profesionales de salud tengan la obligación de adoptar decisiones respecto de que pacientes deberán recibir atención médica en cuidados intensivos y quiénes no ante la situación dilemática de la escasez de recursos sanitarios, y sostiene que el principio de igualdad de trato, en aras de la aceptación general, exige establecer criterios de acción uniformes y transparentes para atender la emergencia sanitaria causada por el virus en cuestión sin que esto implique prescribir que vida se puede salvar y cual no -en caso de eventual conflicto- ya que al Estado no le corresponde la ponderación de vidas humanas.
Por último, establece como principios orientadores, los siguientes:
– Aumentar y estabilizar las capacidades del sistema de salud.
– Introducir un sistema integral de uso optimizado de recursos y capacidades en terapia intensiva.
– Reducir los obstáculos burocráticos para establecer mejores redes entre el sistema de salud y las otras áreas relevantes de la sociedad.
– Expandir la capacidad de pruebas.
– Recopilar, de forma continua, los datos sobre inmunidad individual y grupal de acuerdo a investigaciones efectuadas en torno al Covid-19.
– Financiar y apoyar la investigación de vacunas y demás agentes terapéuticos.
– Preparar estructuras de financiación para la producción en masa e introducción de los medicamentos y agentes terapéuticos en caso de probado funcionamiento.
– Patrocinar la investigación interdisciplinaria de los efectos sociales, psicológicos y económicos en el contexto de la pandemia de Covid-19.
– Desarrollar estrategias de protección y aislamiento efectivas y tolerables para grupos de riesgo.
– Fijar una estrategia bien fundada para la comunicación transparente y regular de las medidas adoptadas y la toma de decisiones políticas en relación con la propagación de Covid-19.
– Repensar la idoneidad de las soluciones federales en caso de desastre, así como los cálculos concretos de los costos esperados a través de la comparación de las medidas tomadas y la posibilidad de plantear escenarios alternativos.
Informe de Elisabet A. Vidal
[1] Cfr. https://www.ethikrat.org/en/press-releases/2020/solidarity-and-responsibility-during-the-coronavirus-crisis/.