El Dr. Elard Koch, Director de Investigaciones del Departamento de Salud Familiar, Facultad de Medicina, Universidad de Chile, expuso el miércoles 2 de marzo de 2011 en la Sala 1 de la Cámara de Diputados de la Nación (Edificio Anexo) los resultados y principales conclusiones de sus investigaciones sobre el número de abortos que se realizan en Chile y en Argentina cada año y sobre la vinculación entre el aborto y la mortalidad materna.
En sus conclusiones, el Dr. Koch:
1) Refuta el actual paradigma que propone la legalización del aborto como medio para reducir la mortalidad materna por esta causa.
2) Constata que el aborto no es la principal causa de mortalidad materna.
3) Demuestra que una legislación que protege la vida humana desde la concepción, es eficiente reduciendo el problema del aborto inducido cuando se combina con las políticas públicas adecuadas.
4) Denuncia que el número de abortos clandestinos informados para la Argentina recientemente (460.000), está sobreestimado. Para Koch, se estiman 47.636 abortos inducidos en Argentina.
5) Señala que una eventual despenalización del aborto en Argentina incrementaría sustancialmente la magnitud de abortos provocados a petición (2,3 veces a los siguientes 10 años y 5,1 veces tras 50 años de legalización o despenalización) estimando que el año 2020 los abortos provocados se incrementarían desde 47.636 a 113.586.
6) La despenalización del aborto puede traer consecuencias deletéreas para la salud materna y neonatal, en especial en países en los que subsista una elevada mortalidad materna.
Algunos desarrollos del experto chileno en el Congreso Nacional, que por otra parte están en vías de publicación en importantes revistas científicas, fueron los siguientes:
1) Prohibición del aborto no incrementa mortalidad materna: Koch demuestra, a través de un estudio de estadísticas vitales en Chile durante un período de 100 años (1909-2009) que la prohibición del aborto en Chile en 1989 no incrementó la mortalidad materna. Además, el aborto clandestino ha disminuido en paralelo con la reducción de la muerte por aborto. El incremento de la educación de la mujer ha sido el predictor que controla esta disminución a lo largo del tiempo, ejerciendo un efecto sinérgico sobre otros factores, sobre todo con las políticas de atención prenatal y especializada en el parto. La legalización del aborto es por tanto innecesaria para reducir la mortalidad materna. Chile presenta la más baja mortalidad materna de Latinoamérica, similar a la de países desarrollados. El riesgo de morir por aborto es prácticamente nulo en la actualidad.
2) El aborto no es la principal causa de mortalidad materna: Otro aspecto importante de lo sostenido por Koch es que en el año 2009 se produjeron 410 muertes maternas en Argentina. De acuerdo con el CIE-10, las causas obstétricas directa e indirecta, excluyendo los códigos O00 a O07 (que incluye los distintos tipos de aborto), constituyeron sus principales causas, alcanzando 78,7%. De las 87 muertes maternas por aborto (21%), los informes oficiales no señalan la proporción correspondiente a abortos inducidos respecto a otros tipos de abortos, especialmente embarazo ectópico, una de las principales causas de urgencia obstétrica.
3) Estrategias de salud para resolver el problema de la mortalidad materna: Koch señaló que si Argentina quiere alcanzar la meta del Milenio en lo que concierne a mortalidad materna, debe incrementar la cobertura de atención prenatal, la atención obstétrica de urgencia y la atención profesional del parto; esta última logró 83,7% de cobertura de los nacidos vivos el año 2009, dejando aún un porcentaje importante de pacientes con alto riesgo obstétrico sin acceso a la atención especializada en hospitales, que contrasta con la cobertura de 99,9% observada actualmente en Chile.
4) El número de abortos en Argentina está magnificado: En Argentina, han cobrado gran difusión mediática las estimaciones que alegan que se realizarían 466.998 abortos anuales. Koch refuta estos modelos, especialmente por que carecen de sustento científico, por su marcado acento subjetivo. El Dr. Koch recurre a una novedosa metodología que se basa en probabilidades biológicas aplicadas a las estadísticas vitales. En efecto, el equipo de Koch utiliza el Modelo de Embarazos Esperados (EPM), que se basa en las probabilidades biológicas de una concepción viable publicadas por Wilcox et al. en la revista New England Journal of Medicine, y a partir de datos objetivos como la tasa global de fecundidad (TGF) y la población femenina en edad fértil, estima el número de embarazos que ocurren cada año en un país. A la luz de estos nuevos conocimientos, no disponibles cuando otros métodos de estimación de abortos clandestinos fueron propuestos, se puede conocer el total de embarazos esperados, la proporción de embarazos que se interrumpen muy tempranamente en forma espontánea, tanto de forma imperceptible como una pérdida clínicamente evidenciada. El resto de los embarazos viables, se dividen en 3 grupos: los que terminan en nacidos vivos, que cada país lleva en sus estadísticas vitales, las muertes fetales, de las cuales también hay registro fiable y el grupo correspondiente a los abortos inducidos calculado como el remanente faltante.
Aplicando este método, Koch estima el número de abortos inducidos clandestinos para Argentina en el año 2007 en 47.636, es decir, 9,8 veces menos abortos que la cifra informada por la agencia Human Rights Watch. Esta sobreestimación en la magnitud de los abortos inducidos también fue observada cuando se utilizó la misma metodología en México, amplificando 10 veces la cifra de abortos inducidos ilegales.
5) La despenalización del aborto resultaría en un notable incremento del número de abortos: Si hipotéticamente el aborto inducido en Argentina fuera despenalizado en el año 2011, Koch proyectó el escenario para los siguientes 10 años ajustando por la tasa de aborto inducido observada en España para el período 1998-2008 en población femenina en edad fértil (15 a 44 años), estimando que el año 2020 los abortos provocados se incrementaran desde 47.636 a 113.586 tras su despenalización (i.e. un aumento de 138% respecto de los abortos ilegales actuales). La tendencia en el número de abortos para los siguientes 50 años siguiendo el promedio de 18 países Europeos con aborto legal, el año 2060 se esperarían en Argentina 245.371 abortos inducidos o legales (i.e. los abortos provocados legales se incrementaran 415%); en tanto en Chile, si se despenalizara el aborto, se elevaría desde 19.390 abortos clandestinos actualmente a 81.788 abortos provocados legales para el año 20607.
6) Problemas sanitarios del aborto legal: en la fase final de su exposición, Koch presentó los problemas sanitarios que se derivan de la legalización del aborto. El incremento del costo sanitario y el desvío de recursos para cubrir la demanda de abortos a petición traen como consecuencia la reducción de los recursos para incrementar la atención prenatal y obstétrica especializada con un impacto deletéreo sobre la salud materna y neonatal.