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Un análisis del Presupuesto Nacional argentino 2022 en relación al aborto y la maternidad vulnerable

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Un análisis del Presupuesto Nacional argentino 2022 en relación al aborto y la maternidad vulnerable

El 15 de septiembre de 2021 se presentó en el Congreso de la Nación Argentina el Presupuesto para el ejercicio 2022. En este boletín presentamos una breve descripción sobre la forma en que son abordados algunos temas críticos.

Líneas prioritarias en Salud

El Ministerio de Salud cuenta con cuatro Secretarías: Equidad en Salud, Acceso a la Salud, Calidad en Salud y Gestión Administrativa; y una Unidad de Gabinete de Asesores

Según el Presupuesto, en su anexo correspondiente a la Jurisdicción 80 (Ministerio de Salud), el Ministerio “se propone trabajar de manera integral y coordinada con todas las Secretarías en las siguientes líneas prioritarias:

– COVID-19. Desplegar todas las acciones necesarias para prevenir, prestar cuidados, mitigar y contribuir con las jurisdicciones provinciales y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) en la asistencia a los pacientes con COVID-19 y en la mitigación de las consecuencias post enfermedad.

– Ley N° 27.610 de Acceso a la interrupción voluntaria del embarazo. Articular acciones con las jurisdicciones provinciales y la CABA para el cumplimiento efectivo de la ley, poniendo en valor el derecho a una salud sexual integral.

Ley N° 27.611 de Atención y cuidado integral de la salud durante el embarazo y la primera infancia. Articular acciones con las jurisdicciones provinciales y la CABA para el cumplimiento efectivo de la ley que resguarda el derecho a la salud de las personas gestantes y de los niños y niñas en sus primeros años de vida.

– Ley N° 26.743 de Identidad de Género. Impulsar la formulación y ejecución de políticas de género y diversidad, que involucra la compra y distribución de insumos para esta población destinataria, así como también la conformación de espacios participativos con la sociedad civil y su articulación con programas, servicios o equipos profesionales a nivel federal.

– Salud Digital. Impulsar una agenda estratégica para contribuir a la toma de decisiones y la gestión sanitaria a través del uso de nuevas tecnologías”.

En particular, la Secretaría de Acceso a la Salud tiene como ejes estratégicos principales:

“- Arbitrar los recursos necesarios para minimizar los efectos de la pandemia de COVID-19, tanto desde el control de brotes como la vigilancia epidemiológica.

– Conducir e implementar la estrategia de vacunación contra el COVID-19.

– Implementar las acciones necesarias para contribuir al cumplimiento efectivo de las Leyes Nros. 27.610 y 27.611 en todo el territorio nacional”.

Salud sexual y Procreación Responsable

Así, en el ámbito de la Secretaría de Acceso a la Salud funciona el programa 25 para el “Desarrollo de la Salud Sexual y la Procreación Responsable”.

Este Programa involucra tanto la distribución de anticonceptivos como la promoción del aborto.

En el proyecto de Presupuesto se afirma: “En cumplimiento de la Ley N° 27.610, el Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, a cargo de la Dirección Nacional de Salud Sexual y Reproductiva, tiene entre sus principales acciones gestionar estrategias para fortalecer el acceso a la interrupción voluntaria y legal del embarazo, y articular acciones y estrategias con otras áreas del Ministerio para fortalecer el acceso a la anticoncepción inmediata post evento obstétrico y mejorar la calidad de la atención post aborto. A su vez, distribuye insumos a efectores de salud pública entre los que se encuentra la medicación misoprostol para cubrir a las personas con capacidad de gestar para el acceso a la interrupción voluntaria y legal del embarazo, y posee una línea de consultas por interrupción legal del embarazo para brindar información y remover barreras de acceso a los servicios de salud de todo el país”.

En lo que hace a la anticoncepción, el Programa estima que para 2022 el objetivo es alcanzar y dar cobertura con tratamientos anticonceptivos al 90% de la población elegible (es decir, mujeres no embarazadas de 15 a 49 años con cobertura del subsistema de salud pública y varones de 15 a 64 años con la misma cobertura). En 2021 el objetivo había sido cobertura del 60% de la población elegible.

En el Anexo del proyecto correspondiente al Ministerio de Salud, se señala que “una de las principales acciones del programa se focaliza en el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional (ENIA), el cual reconoce el impacto que el embarazo no intencional tiene en la vida de las/os adolescentes, así como el derecho de ellas y ellos a tener una vida sexual libre y plena sin discriminaciones de género, a tomar decisiones informadas en virtud de su autonomía progresiva, y a crecer y desarrollarse en entornos libres de violencia, en el marco de un clima cultural propicio que facilite el ejercicio de esos derechos. La respuesta del Plan ENIA se basa en un enfoque de derechos, género y equidad social, y en los derechos reconocidos en el marco normativo de Argentina”.

En lo que hace al aborto, las acciones que se propone el programa son: “fortalecer el acceso a la interrupción legal del embarazo (ILE) en base a la mejor evidencia científica y al marco normativo vigente”.

En 2022 se proyecta distribuir 21.505.000 preservativos y entregar tratamientos en Salud Sexual y Reproductiva en una cantidad de 9.095.000. En 2021 se habían proyectado entregar 25.300.000 preservativos y entregar 10.700.000 tratamientos. El presupuesto no aclara qué engloba la unidad de medida “tratamiento entregado”, si incluye o no abortos o qué tipo de anticonceptivos.

Desde el punto de vista de los recursos, los fondos para el Programa de Prevención del Embarazo Adolescente para 2022 ascienden a $ 954.262.609 y para el Desarrollo de la Salud Sexual y la Procreación Responsable, $ 2.577.117.240.- En 2021, estas cifras habían sido $ 800.534.813 (Embarazo Adolescente) y $ 1.824.052.247.- (Salud Sexual).

El Programa de los 1000 días

En el proyecto de presupuesto se afirma que “la Ley N° 27.611 creó el “Plan de los 1000 días” con el fin de reducir la mortalidad, la malnutrición y desnutrición, prevenir la violencia protegiendo los vínculos tempranos, el desarrollo emocional y físico y protegiendo y cuidando la salud de las personas gestantes y de sus hijos e hijas hasta los 3 años de vida. El plan, liderado por una Unidad de Coordinación Administrativa que funciona en el ámbito del Ministerio de Salud, integrada por representantes del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, Desarrollo Social, Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Registro Nacional de las Personas (RENAPER) y el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, prevé la provisión pública y gratuita de insumos esenciales durante el embarazo y para la primera infancia, coordinando y ampliando los programas que ya existen, creando un sistema de alerta temprana de nacimientos e impulsando un certificado de hechos vitales con el objeto de garantizar el derecho a la identidad de las niñas y niños recién nacidos. Entre los insumos a distribuir se incluyen medicamentos esenciales (Botiquín Mil Días), vacunas, leche, alimentos para el crecimiento y desarrollo saludable en el embarazo y la niñez. Asimismo, se llevarán a cabo acciones tendientes a promover la integralidad en la atención de las personas gestantes y sus niños de hasta tres años a través del acceso a la información, el acompañamiento a niñas y adolescentes embarazadas, la prevención de la prematurez, el abordaje de situaciones de vulnerabilidad y situaciones críticas, el diseño de protocolos de actuación para diversas situaciones (parto respetado, diversidad cultural, primera hora de vida, entre otros), el desarrollo de un plan de sensibilización y capacitaciones, entre muchas otras acciones”.

Esta línea de acción se concreta a través del programa 17 que se titula “Abordaje por curso de vida” en la misma Secretaría y es el encargado de las acciones del Plan 1000 días. Entre los objetivos del programa se mencionan: “Proveer de manera pública y gratuita los insumos fundamentales para las personas gestantes durante el embarazo y para los niños y las niñas hasta los 3 años (Plan 1000 Días)” y “Brindar protección en situaciones específicas de vulnerabilidad, procurando la organización de servicios de salud para los niños y las niñas con necesidad de cuidados especiales en sus primeros años, como ser personas que cursen embarazos de alto riesgo, mujeres u otras personas gestantes en situación de violencia por razones de género, y niñas y adolescentes embarazadas”.

Para el Programa 1000 días en 2022 se presupuestan $ 2.683.170.324.-

No hemos encontrado un rubro similar en el presupuesto 2021. En este punto, resulta difícil comparar esta cifra con el presupuesto anterior. El Programa 17, que en 2022 se denomina “Abordaje por curso de vida”, en 2021 se llamaba “Intervenciones en Salud perinatal, niñez y adolescencia”. Muchos de los objetivos que figuraban en 2021 se replican en 2022, aunque este año se agregan unos nuevos, sobre todo que parecen agrupar las iniciativas en torno al Programa 1000 días. En 2021, el Programa ya incluía distintas iniciativas vinculadas con las madres, como la asistencia con Leche Fortificada (14.500.000 kilogramos proyectados para entregar en 2021, 7.187.408 en 2022), asistencia con medicamentos (744.000 en 2021, 1.397.250 en 2022). entre otros. En la comparación, en 2021 el Programa poseía un presupuesto de $ 7.149.975.073 mientras que en 2022 el presupuesto total del Programa es de $ 11.009.996.909.-

Técnicas de Reproducción Humana Asistida

También bajo el Programa 17 de Abordaje según curso de vida” encontramos las acciones vinculadas con las técnicas de reproducción humana médicamente asistida. Se señala: “El enfoque de curso de vida inicia en la reproducción medicamente asistida, es decir, el garantizar el acceso integral a los procedimientos y técnicas médico-asistenciales de reproducción médicamente asistida. Quedan comprendidas las técnicas de baja y alta complejidad, que incluyan o no la donación de gametos y/o embriones. También se incluyen la crio-preservación de gametos por oncofertilidad”. Para esta acción, en el año 2022 se presupuesta la suma de $ 39.004.772.- Para el año 2021 el Presupuesto total había sido de $ 6.622.932.-

Algunas reflexiones finales

El Presupuesto 2022 es el primero que incluye el aborto legalizado como prestación. Sin embargo, por la forma en que está formulado el presupuesto, no se alcanza a advertir bajo qué metas y objetivos se proyecta el gasto del Ministerio de Salud de la Nación en este punto. Recordemos que, por otra parte, muchos de los gastos vinculados con el aborto corren por cuenta de las obras sociales, las empresas de medicina prepaga o bien las provincias y la Ciudad de Buenos Aires. Además, un porcentaje de abortos se realiza por medio de misoprostol, que suele presentarse como un medicamento “esencial”, a pesar de las críticas que ello ha merecido. En esa cuenta de medicamentos esenciales no aparece discriminada de modo que no puede identificarse ese gasto en el presupuesto.

El aborto aparece priorizado por el Ministerio de Salud en su enunciación de las líneas prioritarias, lo que demuestra la centralidad que esta política pública.

Paralelamente, aparece por primera vez el Programa 1000 días, aunque resulta difícil determinar por el análisis del presupuesto si se trata de partidas nuevas o bien si se trata de la consolidación de iniciativas que ya estaban presentes en anteriores versiones del presupuesto.

Se advierte la continuidad de programas y acciones vinculados tanto con la anticoncepción, como con las técnicas de reproducción humana asistida. En este último caso, es notable el incremento del gasto para 2022 (588%).

Informe de Jorge Nicolás Lafferriere